ORIGEN Y EVOLUCIÓN

La ascendencia de los Perisodáctilos (Mesoaxonia) como los rinocerontes y los caballos, puede seguirse hasta un grupo tan antiguo como los Condilartros del paleoceno y del eoceno, considerándose aparte de los Artiodáctilos (Paraxonia), cuyo origen permanecería misterioso; se sabe hoy que existe cierta semejanza entre los Artiodáctilos del eoceno y los Creodontos, antecesores de los actuales carnívoros fisípedos, antepasados de suyo semejantes a los Condilartros, y ambos (Artiodáctilos y Creodontos), a su vez, podrían derivar de una cepa común originaria Euterina de insectívoros, a fines del cretácico o principios del paleoceno, que inmediatamente después de la iniciación de los carnívoros dio lugar a formas con pezuña, dando los artiodáctilos.

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Las líneas generales de cambio de los diversos representantes de los ungulados no siempre se han producido, y mucho menos a la vez: algunos caracteres, por efecto de la adaptación, han retrogradado; otros han evolucionado en un sentido aparentemente ventajoso; otros se han conservado.

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A la vista de todo el material fósil recolectado y del actual, teniendo en cuenta el considerable paréntesis del cretácico al paleoceno (30 millones de años), se concluye que desde el eoceno la mayoría de los órdenes existentes quedaron ya bien establecidos. Aunque según los autores y el avance en los estudios filogenéticos podemos encontrar distintas maneras de clasificación taxonómica aquí se presentará una clasificación en cuatro «cohortes» principales según el conjunto de los 26 órdenes de mamíferos, reconocidos por Simpsom, superiores y relativamente modernos, de la infraclase euterios, o verdaderamente mamíferos; Corresponde tal clasificación, en lo esencial, a la de Linneo en 1766, basada en la estructura o morfología de los miembros. De estas cuatro cohortes, Cohorte 1: Unguiculados (que tienes los dedos terminados en uñas), Cohorte 2: Glires (Roedores y Lagomorfos), Cohorte 3: Mutica. Dedicada exclusivamente a los Cetáceos (Cetácea) Ballenas y Delfines, y Cohorte 4: Ferungulata, que engloba 15 órdenes de mamíferos agrupándolos en cinco superórdenes, de los cuales, además del Superorden de las Fieras, cuatro superórdenes corresponderían a los Ungulados: Protoungulados (precursores de los distintos ungulados), Penungulados (seudo o casi ungulados) y Ungulados propiamente dichos (Mesoaxonia o Perisodáctilos y Paraxonia o Artiodactilos).

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Algunas clasificaciones reconocen, sin embargo, 50 órdenes. Su inclusión en una sola cohorte es consecuencia de un intensivo trabajo anatómico, paleontológico y filogenético, llevado a cabo concienzudamente durante los últimos 70 años; así, se ha demostrado que son descendientes de una población común paleocena.

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